jueves, 11 de octubre de 2007

Ante el 12 de Octubre


Sabemos todos que no sería de recibo acabar la semana sin atender a este Viernes.
Con justicia corresponde convidar a la reflexión frente a la jornada de mañana. Con ello no se perciban unas manos sucias y politizadas prestas a adoctrinar.No dirige estas lineas ningún espíritu servil que caninamente se posicione con unos u otros, procurare obviar por innecesarias y plebeyas, consignas facilonas y rancias del mismo modo que sospechosamente sencillas, tales como son la dicotomía izquierda-derecha. Conste pues este detalle, que en honor a la verdad, pretende no ensuciar ni el escrito ni este nuestro blog.
Acostumbrados como estamos, asfixiados incluso, de lecturas históricas -generalmente oficiales, y académicamente bienpensantes- que con soberbia enjuician el pretérito, y valorativamente sin decoro ni vergüenza se condecoran con una extraña e incomprensible dignidad moral, propongo una reflexión más atrevida, humilde y evidentemente, intempestiva.
No es esta versión la del relato de las víctimas, harta cultura hay de ello y de todo el tributo, o “tributismo” patológico al sufrimiento, que parece además ser siempre el exclusivo y orgulloso patrimonio de unos sólos. Pero bien, no es menester resbalar entre estas lides ahora,… da lugar pero no procede….
Viajemos por unos instantes al fuego de los acontecimientos, donde nuestra sangre forjóse y cuya impresión en el tiempo, conquistó el carácter de lo eterno.
Durante veinte siglos, el camino de España no tiene pérdida posible. Aprende de Roma el habla con que puedan entenderse sus tribus y la capacidad organizadora para hacerlas convivir en el derecho. En la lengua del Lacio recibe el Cristianismo, y con el Cristianismo, el ideal, luego vienen las pruebas. Primero la del Norte, con el orgullo arriano que proclama no necesita redentor, sino Maestro; despues la del Sur,donde la moral del hombre se abandona a un destino inescrutable. Tambien los españoles pudimos dejarnos llevar por el Kismet. Seríamos ahora lo que Marruecos, o a lo sumo Argelia. Nuestro honor fue abrazarnos a la Cruz y a Europa, al Occidente, e identificar nuestro ser con nuestro ideal. El mismo año en que llevamos la Cruz a la Alhambra descubrimos el nuevo Continente. Fue un 12 de Octubre, el día en que la Virgen se apareció a Santiago en el Pilar de Zaragoza. La corriente histórica nos hacia tender la Cruz al nuevo mundo.” Ni que decir tiene que por cuanto evoca a la esperanza,esta literatura no proviene de los tiempos de Gloria.Estas palabras viven Justificar a ambos ladosa principio de la segunda- tercera década del siglo pasado, y proceden de la voz de un autor de la Generación del 98.
Expresa preocupación, y tiene la trascendencia de reivindicar tiempos mejores ya pasados, donde las virtudes antiguas eran principio de autoridad y respeto y desde las cuales se legitimaba jerarquía toda,pues los hidalgos dominaban con igual elegancia las armas y el latín.
Acaso, reflexionar, atender, “parar el cas”,intentar comprender lo que simboliza la Hispanidad, sea una senda que discurra lejos de un simiesco gruñir agitando una bandera, o un dibujar repetitivo de la conquista allende los mares.Pues eran hombres, como son yemas las que esculpen con majestuosa artesanía, quienes con valor y fe, representaron algo en su conducta,y si infanqueable pervive su gesta, y elogiable su aventura , por ventura no nos quedemos con las meras vestiduras, y si una madre dio hijos así, todavía cabe pensar que pueden volver a nacer.Se trata que desde el ejemplo de su representación, miremos a nuestro alrededor, examinando honestamente nuestra actualidad y respondamos isn ambages si esto que somos es lo que queremos ser. No se trata de parafrasear una oda gratuitamente, sea acaso cosa de un esfuerzo de humildad, que sin duda es siempre principio de garantía de conocimiento. Como no podía ser menos, doy cobijo como digna artillería pesada a nuestros literatos, que si bien de ayer,pesan y exigen todavía, con el buen saber de sus palabras:
Pío Baroja apunta que” con el progreso, se priva al hombre libre de los grandes encantos y emociones de ser perseguido”. Tambien dedicaría un saludo a nuestros contemporaneos "amigos de la transgresión, las liberaciones y demás frutos de la ociosidad.......
“El mérito para los snobs es hacer siempre descubrimientos. Así han llegado al dadaísmo, al cubismo y a otras estupideces semejantes”.
Críticos e intempestivos por definición, voluntad y convicción, dejo concluir a otro del 98, a Unamuno, pues es este artículo tambien memoria de ellos,y hoy podemos decir también con él a quienes pretendan interrogarnos desde la tarima de la legitimidad moral que ”contra los valores afectivos no valen razones, porque las razones no son nada más que razones, es decir, ni siquiera verdad.”


Sin el propósito de haber resultado espeso ni intelectual, pero si seriamente adecuado, un saludo y grato puente para todos caballeros.

1 comentario:

Rémora dijo...

Aunque un poco tarde, como es mi maleducada costumbre, quiero hacer apenas unas menciones elogiosas de este regalo que nos deja nuestro camarada ayax, loado sea.

Su escritura nos ha de servir de faro en esta época de brillante luz que ha de llegar. Una época de luz y de las tenebrosas sombras que a ella acompañan.

Su apreciación de la fecha más señalada de esta España nuestra es interesante porque no es partidista ya que la política, tal y como ahora se entiente, no tiene nada que ver con una cuestión esencialista como es esta.

Además sus referencias son idóneas. La generación del 98 es quizás la última en entender ese algo que es España y es por ello la mejor lectura que podamos recomendar para emprender el reencuentro con la idea primigenia de España.

La cruz, la influencia importantisima del cristianismo, y Europa, en su origen sobre todo, son también símbolos y realidades ineludibles y que parecen obviarse en la mayoria de discursos actuales sobre España o que se transforman en grotescas interpretaciones para alimentar discursos parciales y subjetivos.

Así pués concluyo este adjunto al texto con mis sinceras felicitaciones al que seguramente sea el más noble y sincero de los mios.

Saludos